
Los BRICS buscan fortalecer la cooperación entre sus países miembros para impulsar el desarrollo socioeconómico, reducir la pobreza y el desempleo, y promover el crecimiento sostenible y la justicia social. Inicialmente integrados por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, los BRICS se expandieron en 2024 para incluir a Egipto, Etiopía, Irán, Indonesia, Emiratos Árabes Unidos y, potencialmente, Arabia Saudita. Desde la presidencia sudafricana de los BRICS en 2023, iniciativas como la Plataforma de Ecosistemas de Productividad de los BRICS para el Trabajo Decente cobraron fuerza. En 2025, durante la presidencia brasileña, el tema se incluyó en la declaración ministerial de los ministros de Trabajo, junto con las transiciones estratégicas y la inteligencia artificial. Los países BRICS están abordando desafíos globales como el cambio climático, el empleo decente y la gobernanza inclusiva, facilitando el intercambio de conocimientos y la cooperación. Un enfoque clave para los BRICS es la relación entre la productividad y el trabajo decente. Si bien una mayor productividad suele correlacionarse con mejores salarios y un mejor nivel de vida, este vínculo depende de instituciones y políticas sólidas. Los entornos laborales decentes también pueden mejorar la productividad, creando una dinámica de refuerzo mutuo. En este contexto, el estudio Trabajo Decente y Productividad en Brasil explora la intersección entre la productividad y la calidad del empleo en Brasil. Contribuye a la agenda más amplia de los BRICS y a la cooperación Sur-Sur compartiendo las experiencias y estrategias de Brasil, ofreciendo perspectivas para el aprendizaje mutuo entre los países del Sur Global. El estudio también apoya la cooperación técnica continua dentro de la Plataforma de Ecosistemas de Productividad de los BRICS.